Siendo amante total del cabello largo, símbolo de la femineidad, colaborando con mucho dinero a las peluquerías a lo que va de la fecha, después de varios meses de admirar a las osadas, valientes y rebeldes que decidieron darle duro a la tijera y olvidarse de los alargues, los rodetes y las colas de caballo, aquí vengo yo con mi nuevo corte de cabello, muy corto para lo que tenía, estamos hablando de unos 20 cm. menos de cabello, que deja casi al descubierto la nuca y un tatuaje que tiene 4 años sin ser percibido, gracias a mi ex larga cabellera.
Una de mis ideas al pensar en cortarme el cabello, fue unas largas horas de llanto al salir de la peluquería, hasta llegue a pensar cuanto me saldría el alargue? si el resultado fuese terrible, así que ahí voy a una buenísima peluquería a confiarle mi gran decisión, hermoso corte, pero quedó a la mitad, ni corto ni largo, una decisión intermedia, como que el peluquero no entendió, así como yo misma no lo hice, que es lo que quería?, me gustó, pero no me encantó, por la reacción de algunas personas, estuvo bien, pero nada de otro mundo, mi marido que siempre tiene la precisa y a veces digo que me conoce mas de lo que yo a mi misma, me dice: ese no es un cambio!.
Ok, me dice en voz alta lo que ya me decía el espejo y no me atrevía a vocalizar, al día siguiente a otra peluquería, a terminar lo que había comenzado, el mismo corte, pero mas corto, súper lindo, pero todavía faltaba algo, cuando termina mi tan amorosa peluquera, le digo, no me gusta, por favor, cortame mas, lo que sí, ella tenia mas miedo que yo, seguramente creía que saldría llorando de debajo de sus crueles manos, la pobre vuelve a hacerlo y magia! Por fin lo que yo quería, por fin el cambio que tanto estaba buscando!.
Esa que veía en el espejo era yo, la nueva yo, la que tiene miles de actividades, la que tiene una vida diferente hoy, la que no tiene mas paciencia para ir a pasar horas en la peluquería para luego a los 10 minutos estar de nuevo con la cola de caballo, o un rodete mal hecho, la que prefiere hacer otras cosas en vez de tener toda una ceremonia con el cabello, antes de salir, la que entiende que hay cosas mas urgentes e importantes, si hubiese sabido lo bien que me sentiría con ese cambio, lo hubiese hecho hace mucho tiempo, sin embargo, no era mi tiempo, y estoy feliz igual hoy.
Muchas dirán, que es solo un corte de cabello, yo les digo, que es mucho mas que eso, es ese saber que hoy soy diferente, es saber que hoy tengo la seguridad suficiente para saber que no era mi cabello largo lo que me daba o me quitaba, el saber que soy libre, me siento plena y además tengo un compañero que no solo me acompaña en mis decisiones, sino que me alienta en todo, saber darle su lugar a cada cosa, ser mucho mas que una larga cabellera.
Voy a seguir admirándolas con sus largas cabelleras, y también a las de mi nuevo club de cabello corto, quizás hasta vuelva al primero en algún momento, quien sabe? quizás mañana mis circunstancias sean otras, pero por favor seamos felices y ocupémonos de las cosas que importan, que el largo de nuestro cabello, no nos defina, no nos limite, así como decía un comercial de shampoo, las cosas que divierten, despeinan, así que decidí andar despeinada por la vida, pero que bien la estoy pasando!
