Mujer y familia

Hacía un par de años que no podía, por diferentes motivos, salir de vacaciones, hace un mes, me decidí sin pensarlo mucho, pedí vacaciones, conseguimos con mi marido un poco de dinero y fuimos a pasear al norte argentino, él se quedo un par de días pero por temas laborales tuvo que volver antes que yo, lo extrañe bastante, fue la primera vez que nos separamos mas de dos dias.
Pero bueno, despues les hablo de eso, les decia que estuve por el país vecino, donde tengo familiares que me han acompañado desde que tengo memoria, los tíos afectuosos que te ven poco pero de quienes sentis ese cariño sincero, profundo, ese afecto de gente con quien quizas no pudiste compartir miles de momentos, pero sabes que estan ahi, siempre, para lo que uno necesite.
 Los primos, otro capítulo aparte, en tu memoria viene como una lluvia de recuerdos de las cosas que hicimos de niños, ves como sus hijos se le parecen tanto, ya que vos les viste de niños, esas primas que parecen tus hermanas, complices, amigas, confidentes, las que se abren y en unas horitas "te pones al dia" con las novedades, cuando te das cuenta que el tiempo no pasa cuando el cariño es sincero.
Cuando una reflexiona sobre que no importa que esté pasando en tu vida, en su vida, a veces cosas similares a las tuyas, a veces totalmente opuestas, sin embargo podes sostener charlas de horas, podes darte cuenta que el cariño y el respeto, se conjugan perfectamente para demostrarte que la distancia, no separa a la gente, si la voluntad para estar siempre unidos.
Esa comprension de que las circunstancias no nos permiten estar mas tiempo juntos, es algo que no se consigue todos los dias, ese cariño en donde la gente se preocupa por prepararte todo un banquete para homenajearte y demostrarte a traves de la deliciosa comida todo el amor del mundo, cuando tienen que cambiar su ritmo y su agenda por hacerte sentir bien, de donde venis con unos kilos demas en peso y otros kilos demás en afecto, son cosas que no tienen precio.
Es ahi cuando comprendes que a pesar de tener afortunadamente un gran amor de pareja, una mamá que a veces le parás porque ya te mima mucho, hay una familia que no se elije, que vale la pena, que cualquier cosa que hagamos por ir a verlos y por hacerles saber lo importante que son en tu vida, tienen un valor incontable.

A agradecer a Dios por estos angeles que se dedican a hacerte sentir tan querida!